Cuando nos ponemos un objetivo, empezamos súper entusiastas a entrenar, no importa si vas solo o en grupo; pero conforme pasan los fines de semana, se va haciendo más pesado el levantarte de la cama en la madrugada e irte a completar tus entrenos o distancias. Así que lo más recomendable es que busques una pareja para lograr salir de “tu zona de confort”. Aquí las razones para hacerlo:
- Te ayuda a establecer un compromiso. Siempre es más seguro quedar con alguien para ir a correr, porque así no hay forma o pretexto para que digas “lo hago mañana” o “voy más tarde”. El tener un compromiso con alguien, te obligará a levantarte y salir a correr.
- Persiguen un mismo objetivo. Aun cuando sus competencias sean en fechas diferentes, ambos van por un mismo objetivo: mejorar sus tiempos y conquistar esa meta. De esta manera, logran completar sus distancias y cumplir con el plan de entrenamiento al pie de la letra para disfrutar su GRAN día al máximo.
- Te mantiene motivado. El compartir kilómetros con alguien más es ameno y divertido, pues no se siente tan pesado el trayecto y el tiempo se te pasa volando.
- Comparten “sabiduría runner”. Aunque no lo creas, en estos recorridos, comenzamos a platicar de nuestras diferentes experiencias, lo cual provoca que cada uno comparta sus tips, trucos y consejos tanto de runner como de amigo. Inténtalo, te llevarás una grata sorpresa.
- Fortalecerás lazos. Cuando recorremos equis número de kilómetros, pasamos por muchas etapas; yo pienso que el entrenamiento en sí, siempre es como una terapia en movimiento. Al compartir estas distancias con alguien, profundizamos en temas personales y conocemos a nuestro compañero de kms mucho más y viceversa, lo cual nos hace automáticamente, tener un lazo más estrecho con el o ella. Yo he conocido a mis mejores amigas corriendo.
- No te dejarán abandonar. Si surge cualquier inconveniente, tu compañer@ runner estará ahí para ayudarte. Ya sea recordándote lo capaz que eres para lograrlo o jalándote para terminar.
- Mejorarás tus tiempos. Correr en compañía te obliga a esforzarte más, si tu runner partner lleva un mejor progreso que el tuyo, comenzarás a aumentar un poco tu velocidad y si es al revés, serás tú quien termine ayudando a tu compañer@ de carrera.
- Se plantearán metas. Y no desistirán hasta terminarlas, se animarán uno al otro para lograr el objetivo planteado y no morir en el intento.
- Te sentirás seguro. Si llegas a caerte o a sentirte mal por cualquier razón, siempre habrá alguien que pueda auxiliarte. O viceversa, si alguno de tus compañeritos runners necesitara algo, incluso un hombro o una oreja, ahí estarás para el o ella.
- Abrirá tu mente. Sí, como lo lees, abrirá tu mente para aprender otras formas de entrenamiento, de estiramiento o para conocer lugares nuevos para correr. Incluso te enseñará cosas sobre ti mismo que no sabías que podías hacer.
En mi experiencia, correr acompañada me ha servido para ser constante en mis entrenos y no saltarme ni una distancia. Mi pacer favorito es un amigo, que siempre me “trae en friega” no me deja pararme ¡ni para sonarme! Recuerdo la vez que tuve un “ataque de ansiedad” antes de mi primer maratón, logró hacerme ver las cosas de forma objetiva y sacarme de mi estrés. Es un grinch, pero siempre me enseña algo bueno.
¿Qué esperas? Elige a tu pareja corredora y ¡salgan a conquistar nuevas rutas!
#AnimoChinga #NeverGiveUp #RunHappy